Este fin de semana se dio el pistoletazo de salida del nuevo curso político por parte de los grandes partidos españoles, la fiesta de mitin del PP en la plaza de toros de Valencia, donde ante mas de 2.000 simpatizantes Mariano Rajoy no deja de pasarnos por la cara la absolución por parte del Tribunal Superior de Valencia de los presuntos delitos de su presidente el Sr. Camps, de los que quedo libre; y de otro lado la fiesta en un pueblo minero de León donde al presidente Zapatero dejo algún titular, pero esta vez con menos convicción como el tema de las subidas de pensiones.
Alguna vez por todas, los dos máximos partidos políticos serán capaces en ponerse de acuerdo en algo y tratar de sacarnos del lió económico en el que estamos metidos.
Por las trazas parece que no.
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