Desde hace bastante tiempo convivimos con maquinas automáticas que nos proporcionan todo tipo de servicios, en cualquier lugar y en todo momento dando todo tipo de servicios: cajeros automáticos de dinero, de café, bocadillos, agua, leche(se empiezan a instalar), condones, etc.. Pero la que me parece mas genial, es una maquina que se acaba de instalar en Londres, en la librería Blackwell de Charing Cross Road, donde mientras te tomas un té, puedes elegir un libro entre 500.000 títulos que se va a ampliar a 1.000.000, y salir con él impreso y encuadernado a un módico precio, puede ser un empujón a mucha gente que no quieren perder tiempo en husmear en librerías(uno de los mayores placeres que tengo yo, sobre todo si son de viejo), e ir a tiro fijo sobre un titulo.
Bien venido el cajero automático de libros, que nos darán mas placer y menos gases que las que expenden café.
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