A las autoridades les debe parecer que no. Las imagenes que ilustran este comentario demuestran, lo cerca que están los depósitos de las casas, separados por las vías del tren y la terminal de carga de los buques petroleros que descargan petróleo y se llevan gasolinas, naftas, etcétera.
De la terminal de carga salen una gran tubería (oleoducto) que cruza A Coruña, hasta la refineria de Bens, unos cuantos kilómetros. Si alguna vez sucediera algún problema, nadie lo quiere, nuestras queridas autoridades solo se procurarían de sacarse de encima el problema y de ver a quien se le olvido de firmar un papel (acaso alguna póliza), como nos tienen acostumbrados.
¿Cuántas ciudades conocéis que tengan un puerto de estas características y las cruce un oleoducto? ¡Ninguna!, ni en el mal llamado Tercer Mundo.
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